¿Quién sembró abrojos entre las tiernas hojas del recuerdo?
¿Quién puso tu presencia entre rebujos?
Persistes en la resistencia de esos hilos
que te sujetaron a este universo de araña,
persistes como un tejido interno, negándose a morir.
Y es que quién no te hubiese querido
atesorar para siempre tras la puerta,
y es que fuiste piedra viva de inmaculada cantera
iluminando mi estancia.
19/12/24
Como una araña, envuelve mi alma cual si fuera un cigarrillo.
ResponderEliminarAsí me fui quedando junto a la tuya.
Desde el Tacana con aroma de café y mojado por la intensa lluvia mi corazón para tí late.