sábado, 28 de octubre de 2023

Recuerdos en este sin tiempo


I.


Desvaneceria la mancha de vino en su boca;


y volvería ese raudal de agua fresca a golpear el acantilado,


contemplaría el océano en calma;


si en esa tu gloria fuéramos hombres de nuevo.

II.


Éramos en la cordillera sin divisiones;


y aprendimos a abrir la puerta de los cercos para resguardar el rebaño.


Aun me dejaste la llave para salir a apacentarlo.

III.


Acomodo poco a poco el lente de mis ojos;

me aparto de esa tela negra y áspera.


Voy lavando la ceniza de mi cara como la hija de Jerusalén,


después la hecatombe y el largo silencio de la noche oscura.

IV.

En este cuarto de luz

donde las águilas vuelan en círculo,


ha descendido el relicario con la tiara y tus dones de oro,


ese regalo de quedarte en mí para siempre.

V.


El corazón apacible,


un trozo de carne perfecta y limpia,


ya no sangra más;


solo debo arroparme con el cobijo


que me brindabas cada día.

VI


Y fuimos una sola carne:


dolor, angustia,


alumbramiento, exultación.


sosiego, paz;


los aromas como un riego nutrido sobre el campo;

dos libros escritos unidos por la misma mano,


hechos manantial y esperanza.

VII

Se me permite verte volar...


28 de octubre 2023



Te amo Fausto González

jueves, 5 de octubre de 2023

Preguntas


Visitante en la playa, Rosarito, B.C.


¿Por qué debí dejar todo lo que nos signaba, tan de repente?


Esa manera del Hombre de amputarnos los brazos,

de golpear el calcañar,

y cavar más hondo la fosa...


Las fotografías no traen caricias tibias

ni esa chispa de sentirnos vivos

aunque fuésemos tormenta y calma,

cerezos en primavera y arces rojos.


¿Subir a los trapecios fue menos que polvo,

y todas las emociones vasijas rotas?


Le preguntaba por qué no oyó la voz cuando se acercaban las góndolas,

cuando le invitaban al mar cristalino.

Pero él solo veía las golondrinas y los alcatraces,

él solo recordaba cuando alimentamos a los pelícanos y a los leones marinos;

él no miraba la proximidad del incendio

cuando vimos correr en la playa a los perros.


¿Quién atracará en este puerto que ha sido desdeñado?


¿Por qué mostrar los dientes manchados, las lenguas del desconsuelo?


El agua inundaba el patio, la hierba se fue marchitando, y no podía oler los chiles dulces.


¿Fueron presagios el muelle solitario y la alhóndiga vacía?


Le pregunté por los trazos de futuro dibujados;

por la puesta en escena y la obra inconclusa;

y se sentó en el sillón con aspecto de hombre nuevo,

me miró, y solo extendió sus manos y en ellas, un corazón limpio.

5 de octubre de 2023


Tribulación II

Julio 15, 16 2025 El núcleo de detiene y gira a la inversa enredando los hilos en el corazón  La mujer del cuadro se desdibuja ella hizo con...