Sin ti, la vida es entre rejas;
la bruma te esconde de mis ojos
y duele como un puñal tu belleza.
Las aves duermen en el estío
¿ves sus sombras frente al crepúsculo,
pendiendo de los árboles?
¿Y el alma en huida?
Mi voz se ha envilecido,
y guarda un leve lamento,
la tierna caricia antes del olvido.
Gime la guitarra, el cajón,
las castañuelas,
giro sin rumbo, sin compás;
busco el trozo de madera
que escuche mi zapateo,
pero no hallo mas que arena.
Es fácil hundirse cuando no estás;
ya no quema y endulza tu boca,
queda es la llaga salada de tanto mar.
31 ene 2022